En el año 2007 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró al 2 de abril como Día Mundial de la Toma de Conciencia sobre el Autismo.
La celebración de 2025 de la Organización de Naciones Unidas (ONU), bajo el tema Impulsar la neurodiversidad y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, destaca la intersección entre la neurodiversidad y los esfuerzos de sostenibilidad global, mostrando cómo las políticas y prácticas inclusivas pueden impulsar un cambio positivo para las personas autistas en todo el mundo.
Por Alexia Ratazzi, Directora Ejecutiva de PANAACEA*
“El mensaje de este año vuelve a estar en línea con el paradigma de la neurodiversidad, que es la diferencia que existe entre mentes humanas. Las personas con características dentro del espectro autista forman parte de la diversidad humana. Simplemente, son de una manera que es poco común, no son ni mejores ni peores que otras personas, y tienen los mismos derechos que los demás.
Es una mirada que hace mucho más foco en los talentos y en las fortalezas, y en la necesidad de aceptación y respeto por parte de la sociedad. Y por supuesto, debemos considerar que hay muchas personas neurodivergentes que necesitan apoyos y adecuaciones, y es muy importante brindárselos oportunamente.
Debemos aprender a preguntarles a las personas qué necesitan, qué sueñan, qué les molesta, porque cada persona es única.
La información es poder. La realidad es que todos podemos cambiar nuestra mirada y hacer las cosas de manera diferente. Necesitamos evolucionar como sociedad, ir hacia la unidad y el respeto por la diversidad, darnos cuenta que todos tenemos fortalezas y desafíos; que los seres humanos somos diversos y la diversidad enriquece; que existe un mundo posible que requiere de una gestión humana y de nuestra expansión de conciencia.
El autismo abre puertas y nos trae muchos aprendizajes. Si queremos transformar la realidad, tenemos que empezar por derribar nuestros propios prejuicios y cambiar nuestras actitudes.
Toda persona con autismo tiene talento, creatividad, dignidad, y tenemos que ser conscientes de las valiosísimas contribuciones que realizan diariamente estas personas en ámbitos familiares, educativos, laborales, artísticos, deportivos y comunitarios”.
¿Cómo está posicionada la sociedad Argentina en relación a la inclusión de las personas neurodiversas?
Actualmente hay mucha diversidad en el posicionamiento con respecto a la inclusión de personas neurodivergentes. Probablemente eso tenga que ver con el grado de conocimiento e información en relación al autismo y los nuevos paradigmas de la neurodiversidad y el modelo social de la discapacidad. Por otro lado, en ámbitos donde reinan la ignorancia y el desconocimiento, probablemente existan aún muchas barreras para la inclusión real de personas neurodivergentes.
Se podría decir que ha habido una apertura en los últimos años?
Ha habido cambios en estos últimos años gracias a la difusión y toma de conciencia en redes sociales y medios de comunicación. Pero faltan cosas por hacer, en especial, faltan barreras por derribar, especialmente ligadas a lo actitudinal de las personas, que incluyen prejuicios, mitos, estereotipos. Tenemos que seguir empoderando a la gente a través de la información y el conocimiento.
Cuáles serían los principales desafíos a sortear?
Los desafíos son las barreras económicas, geográficas, comunicacionales, sensoriales y actitudinales que aún existen en muchos ámbitos, y que limitan el pleno ejercicio de derechos humanos de personas neurodivergentes, y el acceso a cosas tan fundamentales como la salud, la educación inclusiva, el trabajo y la vida independiente.
*La Dra. Alexia Rattazzi, es Psiquiatra infantojuvenil- Directora Ejecutiva PANAACEA
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