La cooperativa de reciclaje Creando Conciencia fabrica broches y perchas con polipropileno, el material plástico reciclado obtenido de tapas de gaseosas, base y pico de sifones descartables, en el Polo Cooperativo de Tigre. En el proceso de producción intervienen 6 asociados y se estima que cada hora se inyectan 250 docenas de broches y 250 pares de perchas de distintos colores, que luego son comercializados a través de cadenas de hipermercados y supermercados.
“El proceso consiste en la separación y clasificación en planta, la diferenciación por color, la molienda con dos molinos y luego su inyección directa en una matriz saca una docena de broches cada 19 segundos o dos perchas cada 17 segundos”, explica el presidente de Creando Conciencia y la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (CONARCOOP), Ramiro Martínez.
La cooperativa, que surgió en la localidad bonaerense de Benavídez en 2006 a partir de la iniciativa de recuperadores urbanos, tiene como premisa el cuidado ambiental y la reinserción social de sus integrantes, a partir de la fabricación de diferentes elementos con material reciclado, como útiles escolares y mobiliario urbano que proveen a diferentes municipios y empresas.
Más trabajo, más oportunidades
Por otra parte, como resultado de un acuerdo alcanzado con el municipio bonaerense de General San Martín adquirieron una máquina compactadora de telgopor que servirá, entre otras cosas, para la capacitación de los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo, impulsado por el Ministerio de Desarrollo Social. Con ese equipamiento podrán compactar el telgopor para crear poliestireno puro que será utilizado por Creando Conciencia en la fabricación de los útiles escolares y otros productos.
A la hora del balance, los responsables de la cooperativa reconocen que tuvieron crecimiento en los volúmenes de trabajo, “en especial, como consecuencia de la normativa 317/ del 2020, donde el OPDS instó a grandes generadores a que se adecúen a planes de gestión en la provincia de Buenos Aires. Si bien no todos lo han hecho, esa política pública influyó en generar entre un 20 y 30 % más de trabajo. Este año ya se sumaron 9 clientes para disposición y tratamiento de residuos”, detalla Martínez y añade que “por eso, también, venimos empujando la Ley de envases con inclusión social, entendiendo que sería otra política que favorecía el trabajo y la inclusión, más allá de los beneficios ambientales”.
El crecimiento del trabajo en la entidad también se vio relejado en la incorporación de nuevos equipos, “apuntando siempre a la gestión ambiental con inclusión social. En ese sentido, se sumó maquinaria de mano, líneas de aire, etc. buscando una mayor profesionalización y tecnologización. Y sumamos una moledora de vidrio automatizada, contribuyendo a poder sumar nuevos puestos de trabajo dentro de la economía social”, precisa el titular de Creando Conciencia.
Socios de Triple Impacto
Creando Conciencia es una cooperativa de recuperadores urbanos (ex cartoneros), situada en el partido de Tigre, que se dedica a recolectar, separar, clasificar y reciclar residuos, con dos grandes objetivos, que son el cuidado ambiental y la reinserción laboral. Fue creada en 2006, frente a la preocupación de algunos vecinos por la disposición final de la basura y las condiciones precarias de trabajo de los cartoneros. Hoy, la cooperativa ya cuenta con 51 socios, contratos de recolección en varios barrios de Benavídez y Tigre y diferentes empresas. A su vez, la organización dicta cursos de capacitación para la separación en origen y así colaborar en el trabajo de los recicladores. Sus integrantes son todos promotores ambientales, certificados por la Facultad de Agronomía de la UBA.
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