La crisis habitacional golpea más fuerte a las familias que solo pueden costear pensiones o inquilinatos en condiciones insalubres como alternativa a la situación de calle.
El alquiler social es un modelo de acceso a la vivienda dirigido a las personas que son excluidas del mercado formal de alquileres, como quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad económica, personas mayores o que atraviesan violencias por motivos de género. En otros países se aplica y contempla facilidades para la construcción, capacitación y herramienta de financiamiento.
“Residir en una vivienda adecuada trae aparejada la posibilidad de acceder a otros derechos básicos. Por el contrario, vivir en condiciones inseguras o insalubres tiene un impacto negativo muy alto sobre la salud de las personas, por ejemplo”, explicó Paula Celestino Ayala, directora adjunta de Desarrollo Institucional de la organización.
“Cerca del 90% de las muertes de niñas y niños producidas por enfermedades diarreicas están directamente relacionadas con el agua contaminada, la falta de saneamiento o una higiene inadecuada, situaciones frecuentes en conventillos, hoteles-pensión o inquilinatos”, señaló.
Hay otras consecuencias negativas que las personas que son excluidas del mercado inmobiliario padecen, como recibir respuestas discriminatorias por no contar con una ‘dirección apropiada’ al concurrir a una entrevista laboral o no tener una garantía propietaria o dinero para pagar un seguro de caución al querer alquilar en las condiciones que demanda el circuito formal.
Pedido a los candidatos
Para Hábitat para la Humanidad Argentina, es fundamental que las candidatas y los candidatos que aspiran a ganar las elecciones nacionales a fin de año incorporen a su abanico de propuestas un programa que subsane las necesidades habitacionales del sector más vulnerado del país. Por eso, organizará entre el 4 y el 6 de septiembre próximos las 1° Jornadas de Alquiler Social en Argentina. Laboratorio de soluciones innovadoras.
El espacio tiene como objetivo principal co-producir nuevos conocimientos sobre el alquiler social a través de paneles y mesas de trabajo conformadas por el sector académico, privado, público y de las organizaciones sociales. Especialmente, esperan que representantes de las listas que compitan en octubre se acerquen para conocer la problemática y sumar el tema en su agenda si las urnas les dan el visto bueno.
Para la ONG, es clave identificar que en Argentina hay un déficit de vivienda “cualitativo”, es decir que “el principal problema es la mala calidad de los lugares disponibles para vivir, donde se produce el hacinamiento y el inacceso a servicios. A la vez, los requisitos para acceder a un alquiler formal invisibilizan a muchas familias que no los tienen y, entonces, no pueden acceder a un techo”, describió Celestino Ayala.
“Creemos que es urgente que quienes se postulan para ocupar cargos ejecutivos conozcan lo que les sucede a personas en situación de exclusión socioeconómica y que incorporen en su agenda de gestión en caso de asumir el mandato un programa nacional que dé respuestas reales a esta problemática”, convocó Ayala.
Más información: www.alquileresblue.org.ar
Fuente: Agencia BI – Noelia Leiva
