Gran Meliá Iguazú, ubicado dentro del Parque Nacional Iguazú, obtuvo nuevamente la Certificación de Gestión Sustentable Hoteles Más Verdes en Categoría Oro, otorgada por la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT) y reconocida por el Global Sustainable Tourism Council (GSTC) y la Secretaría de Turismo de la Nación.
Esta distinción responde a la preservación del medioambiente, el desarrollo
social y cultural, y la promoción de las economías regionales, que lleva adelante la empresa.
La auditoría destacó el sólido funcionamiento del sistema de gestión sustentable del hotel,
basado en la planificación, seguimiento y mejora continua de sus prácticas ambientales y sociales.
Asimismo, se reconoció la profundidad del diagnóstico de sostenibilidad, que permite identificar con precisión las áreas de impacto y las oportunidades de mejora, garantizando un abordaje riguroso y comprometido con la mejora continua.
Economía circular
Entre otras medidas, desarrollan la iniciativa Plato Guazú, que impulsa la minimización de
desperdicios alimentarios y fomenta la economía circular mediante la reutilización responsable de recursos. También se valoró el desarrollo de menús circulares y la incorporación de auditorías de seguridad alimentaria, reforzando el compromiso con la calidad y la salud de los huéspedes.
En materia cultural, el informe subrayó las acciones de preservación y difusión del patrimonio local, con la incorporación de elementos de la cultura guaraní, fotografías de flora y fauna autóctona y la reutilización de piezas originales del hotel, promoviendo un diseño auténtico y sostenible.
“Estamos orgullosos de renovar esta certificación que reconoce el esfuerzo sostenido por integrar la sostenibilidad en todas las áreas del hotel, tanto la gestión ambiental como la preservación del patrimonio cultural y social del Parque Nacional Iguazú, y se traduce en un trabajo constante de innovación, capacitación y mejora continua”, expresó Ana Goti, Directora General de Gran Meliá Iguazú.
Además, se reconoció el espacio dedicado en el desayuno a productos típicos regionales —como mate, termo y tortas fritas— y las actividades que sensibilizan a los huéspedes sobre la identidad local, incluyendo experiencias culturales centradas en la yerba mate.














